TAREAS ESCOLARES EN CASA
Hace poco leí
un artículo en el diario el espectador, sobre si era pertinente dejar tareas
para que nuestros estudiantes las
realicen en casa; en él, varios expertos daban sus puntos de vista de por qué
no se debería dejar tareas a los estudiantes, en este artículo vi una frase que
me impacto “Las tareas, son una
equivocación pedagógica y un abuso”.
Los niños y
jóvenes pasan la mitad del día en el colegio en sus aulas de clase he incluso
muchos de ellos tiene horarios más largos o en las tarde tiene profesores particulares, donde siguen estudiando, dejándolos sin espacios de
esparcimiento que les permitan relajasen, compartir en familia, en comunidad, ejercitarse y liberar toda esa energía que por su edad
los acompaña, sin embargo, también es de
saber que las tareas bien manejadas y
orientadas podrían convirtiesen en un
buen apoyo para el estudiante, que le permita reforzar saberes, crear
disciplina y compromiso por su educación.
Debido a que
este tema llamo mi atención, quiero dar mi punto de vista basado en la
combinación de mi rol de estudiante, docente y madre de familia.
La nueva
generación de estudiantes nacen con un chip muy distinto al nuestra, su ritmo de vida, desde que está en el vientre es muy
competitivo, los padres en vez de disfrutar ese momento maternal están es
planificando el genio que será su bebe,
más listo que su primo, que el vecino, que el amigo; tanto que no han
terminado de nacer, cuando ya lo tienen
matriculado en su primer jardín
infantil. Donde no han empezado a aprender su lengua materna cuando ya quieren
que aprendan otro idioma, donde no han aprendido a vestirse, ir al baño y comer
solos, que ya queremos que sepan sumar, restar, multiplicar y dividir.
Muchos
expertos y pedagogos en el transcurso del tiempo han querido cambiar la
pedagogía tradicional por una pedagogía
más activa, sin embargo, en el aula de clase
no se evidencia ese cambio, volvemos a recaer a lo tradicional, en tener
estudiantes receptivos y no participativos, a llenar el tablero y a dejar un
montón de tareas que ni entienden su finalidad y que no les da tiempo libre de
pensar en nada diferente que no sea el
colegio. Todavía los padres de familia
piensan que si no se escribe mucho en el cuaderno, no están aprendiendo
sus hijos y que si no se dejan tareas los estudiantes y profesores son unos flojos.
Todo esto a
que ha conducido a nuestros niños, a que tengan una actitud negativa hacia el colegio y el
aprendizaje, a la extinción de la curiosidad infantil; frustrando a los niños, provocando tensión, estrés y llevándolos al abandono escolar a la rebeldía hacia el
adulto ya que ellos sienten que los están privando de su derecho de ser niños,
de tener su espacio de juego y actividades propias de su edad.
Ahora, la
pregunta es ¿para que queremos dejar tantas tareas? si al final es el padre de
familia el que termina haciéndolas o simplemente llegan los cuadernos sin
ninguna solución. Estamos exigiendo tiempo de calidad de los padres para sus
hijo, pero el exceso de tareas no colaboran con esto, en la actualidad tanto
papá y mamá debe salir a trabajar para poder tener una calidad de vida
medianamente cómoda, llegan cansados de una larga jornada laboral ¿ustedes
creen que papá y mamá llegan con el ánimo de hacer tareas escolares? Creo que no, llegan tan cansados que por querer que sus
hijo terminen pronto sus labores académicas, los gritan, los castigan, causando
heridas y traumatismos en la relación de hijo hacia los padres y de estudian hacia el colegio ya que
ellos siente que es por culpa de su maestra fue que les causo esas molestias con su
familia.
Esto no
quiere decir, que no debemos dejar tareas; simplemente que estas deben de
servir de refuerzo a los temas que se vieron en las clases, ejemplo, si en
matemáticas vieron sumas y restas pues dejo dos o tres ejercicios de estos, que
él los pueda hacer solo y no se necesita
dejar 10 ejercicios de cada uno para saber si el niño entendió o no, además que
el niño se aburre y desespera haciendo una misma actividad por mucho tiempo. O
dejarles actividades creativas donde ellos puedan manipular objetos,
materiales, pintar, usar la tecnología, donde sientan que las actividades escolares no son aburridas al
contrario les cause interés para que así puedan tener un aprendizaje
significativo y vean lo útil que es aprender lo que están aprendiendo. Fuera de esto les quedara tiempo
para compartir en familia, con los amigos, hacer otras actividades diferentes,
practicar un deporte, un arte, ayudar con los deberes de la casa, que son
también actividades que le permiten a
los niños a disciplinarse, ser más responsables y liberar todas esas tensiones
y energía que los hacen en algunas
ocasiones agresivos, represivos y deprimidos.
SANDRA GARCÍA - TUTORIA 5